Puntos de Anclaje Certificados

Tipos de Puntos de Anclaje

Existen cinco tipos de puntos de anclaje para trabajo en alturas, clasificados en tres grandes grupos: anclajes temporales, anclajes fijos o definitivos y anclajes de peso muerto. Teniendo en cuenta la norma que los rige, hablamos de la norma para puntos de anclaje certificados EN 795A para los fijos, de la norma para puntos de anclaje certificados EN 795B para los temporales y de la norma para puntos de anclaje certificados EN 795E para los de peso muerto.

Los anclajes temporales y contrapesados se usan habitualmente para trabajos de corta duración o en lugares efímeros, mientras que los puntos de anclajes fijos se instalan para un uso continuado en el tiempo. A los primeros les afecta en gran medida los agentes meteorológicos como pueden ser la lluvia, los rayos ultravioletas, el viento, etc.; mientras que los segundos son aptos para su uso continuado a la intemperie, incluso en ambientes turbulentos.

Descubre más abajo y al detalle cómo se clasifican los puntos de anclaje que hemos mencionado en este apartado.

Puntos de Anclaje Fijos EN 795A

A grandes rasgos, los puntos de anclaje fijos EN 795A son elementos que se anexan a paramento o estructuras portantes, bien mediante instalación por medios mecánicos o por medios químicos, a través de una resina de 2 componentes, por ejemplo. Los puntos de anclaje fijos EN 795A requieren una certificación de instalación o puesta en uso, y posteriormente sus revisiones anuales. Dentro de este tipo de puntos de anclaje se encuentran los de aluminio y los de acero, para interior, exterior o ambientes agresivos, aptos para una sola persona o para varias, con un solo eje de trabajo o con posibilidad de ser solicitado en varios ejes de trabajo, etc.

También existen elementos excepcionales como pueden ser los puntos de anclaje fijos o definitivos de cuerda, habitualmente destinados a un uso como puntos de anclaje para techos o de pared; puntos de anclaje para vigas o raíles, que en este caso se incluirían dentro de los puntos de anclaje portátiles, e incluso para ser anclados a la tierra.

Anclajes metálicos para hormigón

Dentro de los anclajes metálicos para hormigón podemos incluir todos aquellos anclajes fijos que instalamos a través de medios mecánicos. El proceso de instalación de puntos de anclajes metálicos para hormigón consiste, básicamente, en taladrar el paramento con el mismo diámetro que el perno a introducir como fijación metálica, dejando fuera de agujero rosca suficiente para añadirlo.

Una vez hecho esto, colocamos sobre la fijación nuestro punto de anclaje EN 795A más su arandela y tuerca, apretando esta hasta conseguir que el anillo interior que acompaña el perno se encasquille dentro del agujero, provocando el bloqueo. Es importante que dicho par de apriete máximo se corresponda con el indicado por las instrucciones del fabricante del punto de anclaje certificado EN 795A.

Mira a continuación algunos de los puntos de anclajes metálicos para hormigón más vendidos de nuestra tienda. Estos son aptos para su uso de manera inmediata, sin requerir ningún tiempo de espera.

Anclajes químicos

En este caso, cuando se trata de la instalación de anclajes químicos, en vez de un perno, se debe introducir una barra roscada del diámetro indicado por el fabricante de la pieza dentro del agujero practicado en el paramento. Este lugar previamente lo debimos rellenar con resina de 2 componentes. Por reacción térmica, los dos elementos se rigidizan generando el empotramiento. Para esto se requiere un tiempo de espera.

Los puntos de anclaje para vigas u otros elementos metálicos únicamente requieren atravesar el perfil y atornillar.

Puntos de Anclaje Temporales EN 795B

Lo más destacado que hay que mencionar cuando llegamos a los puntos de anclaje temporales EN 795B es la inmensa diversidad que existe en el mercado de estos elementos. Esto ocurre porque dentro de cómo se clasifican los puntos de anclaje, se trata de la categoría de puntos de anclaje para trabajo en alturas más indicada. Digamos que al ser anclajes móviles y transportables, o puntos de anclaje portátiles, como prefieras llamarlos, son muy accesibles para los distintos trabajos en altura.

También llama la atención el bajo coste que tienen algunos de estos anclajes en altura, los cuales pueden tener un bajo precio, como ocurre con los llamados aros de cinta o anclajes textiles o de cinta. Lógicamente, antes de planificar un trabajo en altura, deberías ser conocedor de los distintos equipos que ofrece el mercado y de cómo puedes adaptarlos a tus circunstancias. Acompáñanos en este pequeño recorrido que vamos a hacer por los distintos anclajes en altura que existen, y para qué trabajos habituales pueden ser los más acertados. ¡Vamos!

Puntos de Anclaje por Peso Muerto

Bajo la normativa EN 795E de los puntos de anclaje certificados encontramos los denominados puntos de anclaje por contrapeso, de peso muerto o por lastre. Este tipo de punto de anclaje consiste básicamente en generar tal peso que contrarreste la fuerza ocasionada por la caída de una persona en el transcurso de un posible accidente laboral. 

Existen, básicamente, dos sistemas dentro de los puntos de anclaje por peso muerto que generan el lastre. Por un lado, mediante pesas bien de hierro, hormigón o de pvc rellenos de árido; y, por otro lado, mediante aporte de agua, normalmente por medio de un material de neopreno que permite llenarlo de agua.

Ambos sistemas de puntos de anclaje por contrapeso tienen sus pro y contras. El sistema de agua es fácil de transportar, pero necesita que exista en el lugar donde se va a utilizar un punto de agua, y poder posteriormente desaguar. Respecto al punto de anclaje mediante contrapeso, la mayor desventaja es que resulta complicado su transporte, tanto por volumen como peso, pero es el más indicado en un lugar de trabajo donde no hubiera un punto de agua. Quizás también, este tipo de punto de anclaje por peso muerto sea más duradero por el propio material con el que se encuentra fabricado.

Productos relacionados con los Puntos de Anclaje

Una vez disponemos del punto de anclaje instalado como primera tarea de la cadena llamada sistema anticaídas, encontramos otros elementos relacionados a los que podemos vincular lo que ya tenemos para confeccionar el sistema anticaídas más adecuado para el trabajo en altura que haya que realizar.

En ningún caso debemos confundir estos tipos de puntos de anclaje, con los puntos de anclaje para arneses ya que, aunque comúnmente son denominados de igual forma, estos anclajes de los arneses son anillas que forman parte del arnés de manera indivisible. Dichas anillas suponen las zonas de conexión con el sistema anticaídas empleado en el lugar donde se vaya a realizar el trabajo en altura.

Si tu pregunta es cuánto puntos de anclaje tiene un arnés, que sepas que pueden llegar a disponer hasta cinco puntos o anillas de anclaje, pero ten en cuenta lo que te hemos indicado al inicio del párrafo anterior: no confundas estos tipos de puntos de anclaje, con los puntos de anclaje para arneses.

Si te surge alguna duda respecto a los puntos de anclaje certificados que hemos tratado en este artículo, no dudes en contactar con nuestro equipo de especialistas a través de este enlace.

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